sábado, 19 de enero de 2013

Tu, si.

Que ligereza tus párpados.
Fríos.
Que se cierran.

Que perversa la mirada,
Cálida,
Que se esconde.

Que tremendo el dolor
Que siento
De buscarte

Que malvada la sangre
Que hierve
La mano que busca
Y la lengua que se pierde.

Que bien que pienso y te encuentro
Siempre
Entre mis manos.

Tu, si.

Samuel Rodríguez